¿Qué son las Constelaciones Familiares?
Apartados del artículo
- 1 ¿Qué son las Constelaciones Familiares?
- 1.1 ¿Y qué es un sistema?
- 1.2 ¿Para qué sirven las Constelaciones Familiares?
- 1.3 ¿En qué se basan las Constelaciones Familiares?
- 1.4 Fenomenología
- 1.5 Comprensión Sistémica
- 1.6 Ley de pertenencia
- 1.7 Ley de jerarquía u orden
- 1.8 Ley de compensación (dar y recibir)
- 1.9 ¿Qué es constelar?
- 1.10 Los representantes y participantes
- 1.11 ¿Cuánto tiempo dura una constelación?
- 1.12 ¿Cuándo acaba una constelación?
- 1.13 ¿Cuánto se tarda en ver los efectos de la constelación?
Las constelaciones familiares son un método terapéutico creado por Bert Hellinger que permiten tomar conciencia de aspectos que limitan nuestra vida y nos hacen sufrir.
Desde la perspectiva sistémica se entiende que mucho de lo que nos sucede, tanto positivo como negativo, es debido a los vínculos de amor y lealtad hacia nuestro sistema.
El bioquímico Rupert Sheldrake hizo su teoría científica sobre los campos mórficos que describiría científicamente el fenómeno de las constelaciones familiares.
Según el investigador, (los campos mórficos o morfogenéticos) permiten la transmisión de información entre organismos de la misma especie sin mediar efectos espaciales y guardan su memoria colectiva (Las Constelaciones Familiares, Peter Bourquin).
En el ámbito que nos ocupa, se refiere a que estamos conectados con los sistemas a los que pertenecemos más allá de lo que pensamos, principalmente la familia.
¿Y qué es un sistema?
Un sistema es un conjunto de elementos interrelacionados que forman algo más grande. Ejemplos de sistema son una familia, una empresa, un equipo, un país, etc.
Con esa comprensión, podemos entender que una persona forma parte de varios sistemas con los que interactúa y que influyen en ella.
En un sistema cada miembro tiene unas obligaciones y unos derechos dependiendo del lugar que ocupe. En la familia o en el trabajo que son las grandes áreas de nuestra vida, si no tenemos claro cuál es nuestro lugar, aparecen los problemas. Y esto lo podemos ver también en las relaciones de pareja. A veces uno se coloca por encima o por debajo de la otra persona provocando así un desequilibrio en la pareja que puede ser el motivo de diferentes conflictos o problemas.
¿Para qué sirven las Constelaciones Familiares?
Las constelaciones familiares sirven para desenredar los bloqueos sistémicos que afectan a la persona en los diferentes ámbitos de su vida.
Debido a las implicaciones con nuestro sistema, muchas veces estamos mirando de forma inconsciente al pasado o repitiendo el destino de otro familiar anterior. Gracias a las constelaciones familiares podemos resolver los conflictos sistémicos que nos afectan y recuperar nuestra capacidad de vivir en el presente.
El que no conoce su historia tiende a repetirla. Quien no sabe de donde viene, tampoco sabrá para donde va. Quien no reconoce a su padre y a su madre, nunca podrá encontrar su verdadero camino.
Bert Hellinger
Cuando la persona no ha madurado correctamente, todavía vive como el niño que fue, perdiendo así su fuerza.
En ocasiones ocurre que ocupamos un lugar que no nos pertoca y es así cuando se produce un desequilibrio en el sistema. En este sentido las constelaciones ayudan a tomar conciencia de dónde está la persona y poder así tomar el lugar que le corresponde.
Con las constelaciones familiares se puede tomar conciencia de lo que está impidiendo a la persona llegar a su crecimiento personal y ganar fuerza para vivir su vida con plenitud.
También permite entender conductas que están fuertemente arraigadas en las personas.
¿En qué se basan las Constelaciones Familiares?
Fenomenología
Por un lado tienen sus bases en la fenomenología que consiste en la observación de los hechos tal como son.
Un ejemplo.
En una constelación familiar en la que un hombre quiere arreglar algún problema con su pareja, su representante puede mostrarse enfadado con la representante de su pareja, aunque este hombre no sienta ese enfado en su vida cotidiana.
Lo que sucede en este caso, es que el hombre está enfadado a un nivel profundo del que no es del todo consciente. Es posible que el hombre se sienta dolido o molesto con su pareja por algo que sucedió en el pasado y que aún exista en su interior el enfado.
La constelación podría desvelar esa emoción de la que no es consciente o ha negado todo ese tiempo y podría resolver los problemas de pareja que tenían.
La fenomenología es observar y aceptar lo que sucede, más allá de lo que podamos pensar o creer. En el ejemplo descrito, podíamos ver al representante del hombre enfadado. Lo que sucedió es el enfado hacia su pareja. Aunque el hombre lo pudiese negar, la constelación mostró que existe una emoción de rabia.
Aprende a gestionar las emociones negativas.
Comprensión Sistémica
Por otro lado, las constelaciones familiares tienen una comprensión sistémica. Las constelaciones familiares siguen 4 leyes basadas en la observación de los fenómenos que ocurren y de los resultados que conllevan:
- La ley de pertenencia
- La ley de jerarquía o respetar el orden
- La ley de equilibrio entre dar y recibir.
- Asentir a lo que es.
Cuando no se respeta alguna de estas leyes, se produce un desequilibrio en el sistema que posteriormente algún familiar descendiente intentará compensar de forma inconsciente.
Este tipo de implicaciones sistémicas se pueden reflejar en una constelación familiar y así, la persona puede tomar lo que es suyo y soltar lo que no le pertenece.
Explicaré las ideas principales de estas cuatro leyes.
Ley de pertenencia
Todos los miembros del sistema pertenecen al sistema. Y aunque parece algo obvio, estoy casi seguro que en todas las familias hay alguna persona que ha sido olvidada, excluida o menospreciada.
Cuando se excluye a algún miembro de la familia o se deja algún asunto inconcluso, otro miembro de la siguiente generación o posterior, repetirá de forma inconsciente su destino.
La solución para la persona que repite el destino de otro miembro del sistema, pasa por honrar e incluir al excluido.
Se excluye a una persona del sistema por vergüenza, por miedo, por dolor…
Excluir a alguien de un sistema familiar es una herida muy grande para todos, que deberá ser reparada por otro miembro.
¿Cuál es la causa de estas repeticiones?
El amor y la lealtad al sistema es la causa de repetir el destino de nuestros antepasados, impidiendo tomar nuestra vida.
Es increíble como una constelación muestra estos vínculos que nos atan a las personas de nuestro sistema.
Ley de jerarquía u orden
El que llega antes tiene prioridad y más derechos que los siguientes. En una familia, los padres tienen prioridad sobre los hijos. En una pareja, la otra persona tiene prioridad sobre el hijo en común. No obstante, si uno de los dos tiene un hijo de otra pareja anterior, éste tiene prioridad sobre la pareja actual.
Si una pareja da más prioridad a su hijo (en común), la relación corre peligro, y el hijo estará en un lugar que no le corresponde llevando una responsabilidad demasiado grande y sintiéndose demasiado importante.
Por otro lado, el orden entre sistemas funciona al revés, el nuevo sistema tiene prioridad ante el anterior. En el caso de la familia, el sistema familiar que crea una pareja tiene prioridad sobre las familias de origen de cada miembro -aunque llegaran antes-. Por lo tanto, cuando uno de los miembros de la pareja o ambos dan prioridad a sus familias de origen, pueden surgir problemas en la pareja.
Es frecuente que un hombre dé más prioridad a lo que dice su madre que su propia mujer. O la mujer que de alguna manera sigue teniendo a su padre tan alto que ningún hombre es lo suficiente bueno para ella, incluso su actual pareja.
En el ámbito empresarial, funciona de la misma manera. Así, el que lleva más tiempo tiene prioridad sobre los que lleguen después, aunque el cargo sea inferior al nuevo integrante de la organización
Ley de compensación (dar y recibir)
En todo sistema hay intercambios positivos y negativos. En los vínculos más importantes como son los hijos y padres, los padres dan y los hijos toman. Cuando un hijo por amor hacia alguno de sus padres se coloca de salvador, pierde su fuerza para vivir su propia vida, además de ser inútil. Como hijos no podemos devolver lo más grande que hemos recibido de ellos, LA VIDA.
Por otro lado, tampoco nos ayuda como hijos estar enfadados con nuestros padres o no aceptarlos por como son por cómo llevan sus vidas. Ellos nos dan la vida y si hemos llegado a ser adultos, es porque nos dieron las monedas suficientes para ocuparnos de nuestra vida.
Las monedas simbolizan, por tanto, todo lo que hemos recibido de ellos (nuestros padres), incluyendo, por supuesto, el regalo más grande que es la Vida. Tomar las monedas significa tomarlo todo. Todo exactamente como fue, sin añadir ni quitar nada, incluyendo lo dulce y lo cruel, lo alegre y lo triste, lo ligero y lo pesado.
Los hijos deben tomar tanto lo bueno como lo malo de sus padres, aceptarlo y acogerlo en su corazón. Todo. Tal como fue. Así la persona puede vivir su vida con abundancia, y es entonces cuando devuelve la deuda a sus padres. No hay mejor regalo para los padres que un hijo viva plenamente su propia vida.
En cambio, en la pareja el intercambio tiene que ser equitativo. Una pareja es una relación entre iguales, y cuando por ejemplo, uno da más que otro o éste último, no puede recibir, el que recibe siente una deuda que pueda llegar a pesar demasiado y decidir marcharse para deshacerse de ese peso.
En consulta me encuentro muchas personas propensas a aguantar y dar mucho al otro. Se quejan de no recibir lo mismo o de no sentirse queridas. En estos casos hay claramente una descompensación, que paradójicamente tratan de resolver el malestar dando aún más, dinámica que prolonga los problemas.
Ese intercambio ha de ser equitativo para lo positivo y lo negativo. Es obvio, que contra más intercambios positivos tenga la pareja, más fructífera será ésta. Lo que ocurre en muchas relaciones de pareja, es que hay demasiados intercambios negativos y la relación se vuelve tóxica.
Asentir a lo que es
Aceptar lo que sucede más allá de lo que queramos o creamos. Decir sí, lo tomo tal y como es. Asentir es ir un paso más allá de la aceptación. Es tomar lo que es. Byron Katie lo deja claro en el título de su libro Amar lo que es.
Solo cuando asentimos a la vida con sus más y sus menos, podemos crecer y liberarnos del sufrimiento.
Por naturaleza, el ser humano tiene una visión distorsionada de la realidad debido a su percepción errónea de la que tanto hablan los budistas. Por eso es nuestra responsabilidad trabajar para ver y aceptar la realidad tal y como es.
Cuando asentimos a la vida, dejamos de pelearnos con ella. Algo cambia en cómo experimentamos lo que nos sucede. Hay una dulce calma interior.
¿Qué es constelar?
En una constelación hay tres roles que participan en ella:
- El terapeuta que dirige la constelación.
- El cliente que quiere trabajar un tema personal.
- El representante.
A grandes rasgos podríamos resumir la dinámica de una constelación de la siguiente manera:
- El cliente hace una demanda al terapeuta sobre un problema que hay en su vida y quiere solucionar.
- El terapeuta explorará con el cliente la demanda. Si la demanda es apta para constelar, el terapeuta procederá a sacar a los representantes de las diferentes personas o partes implicadas sobre el asunto que quiere tratar el cliente.
- Los representantes irán moviéndose por la sala de la forma que así sientan.
- Cuando se ha llegado a un punto final, el terapeuta da por cerrada la constelación y todos los representantes se sientan en su sitio.
El resultado final de una constelación es como una foto de todos los representantes que ayudan a la persona a tomar conciencia del asunto que se ha de reparar.
Los representantes y participantes
En muchas ocasiones la persona que sale de representante trabaja asuntos suyos sin pretenderlo. Esto se debe a la energía del campo mórfico. La persona que representa puede tener una resonancia emocional o vibratoria con la figura que está representando y tener así una experiencia sanadora para sí misma.
También sucede que el tema que está trabajando un cliente se parece al de otro participante y eso le puede dar luz a su propio asunto. Aquello de…
¡Ah, eso es lo que me pasa a mi!
Es interesante acudir a varias constelaciones como representante o simplemente como participante para ver el funcionamiento de éstas y quién sabe, quizás llevarse un regalito inesperado.
¿Cuánto tiempo dura una constelación?
El tiempo de una constelación puede variar entre 15 minutos y una hora aproximadamente.
¿Cuándo acaba una constelación?
Hay dos momentos:
- Cuando la constelación se ha quedado estática y no avanza.
- O cuando el cliente tiene la información suficiente para su demanda.
¿Cuánto se tarda en ver los efectos de la constelación?
Los efectos de la constelación pueden ser inmediatos o pueden tardar semanas o meses. Hay movimientos que son más ágiles y otros que necesitan más tiempo. También dependerá de las resistencias y la responsabilidad del cliente para efectuar el cambio.
Espero haber podido aclararte lo que son las Constelaciones Familiares y sus efectos. Si estás interesad@ en resolver alguna situación personal mediante las constelaciones familiares, suscríbete para estar al corriente de los talleres que realizo.
Si deseas trabajar de forma individual, te invito a ver el Proceso Sanando Relaciones.
¿QUIERES MEJORAR TUS RELACIONES DE PAREJA?
Te regalo mi GUÍA GRATUITA donde aprenderás a:
- Nutrir tu relación.
- Evitar los juegos de poder.
- Sustituir dinámicas tóxicas por otras más sanas.
- Construir vínculo y confianza.
- Valorarte y valorar a tu pareja.